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10/10/07

Príncipe sodomita


Hija del verano says:
Cuéntame un cuento…. ándale
[c=46][b]Rick!!![/b][/c] says:
No princesa, yo no soy bueno improvisando
Hija del verano says:
Mmmm bueno, entonces yo te cuento uno a ti
[c=46][b]Rick!!![/b][/c] says:
Va
Hija del verano says:
En un lugar de cuyo nombre no quiero acordarme vivía una hermosa niña al lado de su inseparable perro
Hija del verano says:
El animal en realidad era un príncipe, que hechizado por la bruja del oeste estaba condenado a ser un perro por el resto de la eternidad. Cada noche recorría con su hocico las piernas de la niña y las lamía todas subiendo con la lengua hasta su entrepierna
Hija del verano says:
Allí estaba la pócima que le permitía tomar forma humana a la luz de la luna. Sin embargo, el efecto de la sustancia era temporal. El príncipe no entendía por qué razón esto sucedía. Necesitaba deshacerse de ese hechizo para poder retornar a su reino y destruir a la malvada bruja del oeste y no comprendía por qué diablos el efecto era pasajero
Hija del verano says:
una mañana, cuando se encontraba en su forma de can, mientras su pequeña ama corría tras un papalote se topó con la sabia serpiente, su antiguo consejero quien en el golpe de estado que lo había destituido había sido convertido en un reptil por los enemigos. Después de saludarse efusivamente y compartir un poco sus penas el príncipe le habló a su consejero acerca de la contrariedad que sufría. Después de pensar largamente su respuesta, la serpiente le dijo al príncipe que iría a consultar esa información con el buen oráculo y que se verían al día siguiente en el mismo lugar.
Hija del verano says:
al siguiente día en la mañana el príncipe se encontró con una enorme dificultad. La niña, perezosa por naturaleza, no quería levantarse de la cama.
Tenía sueño y no se daba por enterada de nada a pesar de los constantes ladridos de su adorado perro. El príncipe tenía urgencia de volver a la pradera para encontrarse con la serpiente y ver esa carita tan indolente y amodorrada le causó verdadero enojo, así que sin pensarlo dos veces saltó arriba de la cama y con sus afilados colmillos mordió la suave piel del cuello de la niña perforando la superficie y haciendo fluir la sangre sonrosada y almibarada
Hija del verano says:
SIGUES LEYENDO O YA TE DORMISTE?
[c=46][b]Rick!!![/b][/c] says:
aqui estoy
[c=46][b]Rick!!![/b][/c] says:
al sentir la fuerte mordida en su cuello la niña se despertó suavemente. Abrió sus ojos despacio y con las yemas de los dedos empezó a acariciar el largo y suave pelo de su perro. Aquella mañana de primavera la niña se puso un vestido blanco de algodón con bandas en la cintura que formaban un gran moño en la espalda, encaje en el cuello y unas diminutas flores azules en el pecho. Ya vestida y después de desayunar alegremente, salieron a tomar el sol. Ella se recostó bajo un árbol y él le comenzó a contar historias fantásticas al oído, hasta que se quedó profundamente dormida, con una respiración acompasada y tenue
Hija del verano says:
Entonces la serpiente apareció y dijo: “Son grandes y buenas las noticias que estoy a punto de ofrecerle, el oráculo ha hablado, mi señor, y tengo ya la respuesta que dará solución a nuestro males. Las portentosas fuerzas del abismo, las incalculables, las infinitas, las que siempre han estado y estarán, ellas, mi señor, han hablado. Mi grande y poderoso señor, heme aquí comunicándolo: para que la sustancia tenga un efecto duradero, vos debeis sodomizar a la pequeña. El príncipe se quedó pensativo... cualquiera diría que estaba sonriendo
Hija del verano says:
el capítulo 1 ha terminado. Sigue el 2... desea continuar?
[c=46][b]Rick[/b][/c] - Vendo iPod says:
Siiiiii
Hija del verano says:
Capítulo 2: De como con artilugios el Príncipe recuperó su forma humana.
El príncipe caminaba con lentitud hacia donde se encontraba su dueña... se detuvo sobre un montículo de tierra que se encontraba a unos cuantos metros de la que dormía. La vio de manera distinta. Los zapatos tirados distraídamente por allí y los pies desnudos abrazándose como si se dijeran cosas suavemente. El príncipe se puso a pensar con detenimiento el lugar ideal para llevar a cabo su hazaña. Fue entonces que recordó el bosque negro, el lugar del sueño eterno, donde habitaba la nada. También recordó que cuando había nacido su oráculo había dicho que él triunfaría entre las ramas retorcidas de aquel lugar.
Hija del verano says:
el atardecer pintaba de rojos el horizonte y la niña continuaba en un profundo sueño. En el último respiro del sol el príncipe se metió por última vez en forma de perro bajo la falda de la niña. Recorrió el conocido camino, lamió y mordió con gusto y sin reparo. Llegó a la fuente, bebió la sustancia sagrada y la metamorfosis comenzó. Era el príncipe un hombre sumamente hermoso, de rasgos firmes y labios rosas. Su piel suave y blanca contrastaba con una estructura física contundente, guerrera y sus ojos tenían un extraño brillo, perverso y seductor. Su cubría con una capa de terciopelo negro y calzaba botas de oso.
Hija del verano says:
con sus manos, que parecían dos lobos encarnados, acarició el perfil de la niña, la vio con ojos de hombre y paseó sus dedos en la fresca tela que cubría aquella piel tibia. La miró fijamente y ella abrió los ojos caprichosamente. Acostumbrada a ver aquella figura entre sueños, sonrió satisfecha y rodeó con sus brazos el cuello de su príncipe. El la tomó de la cintura y con un movimiento rápido la acunó entre sus brazos mientras ella escondía el rostro en su pecho
[c=46][b]Rick[/b][/c] says:
continua...
Hija del verano says:
mientras el príncipe caminaba hundiendo sus pisadas en la tierra con violencia, el tiempo se detuvo, como suele pasar cuando grandes cosas suceden. De este modo, sin saber cómo ni cuándo, llegaron al bosque negro.Estaban en el centro de un círculo perfecto. La luz rojiza proporcionada por los enormes cirios que limitaban el círculo hacían que las sombras se prolongaran en el suelo. No había viento. Todo estaba detenido. La niña, en un estado de dócil somnolencia obedecía todo aquello que el príncipe ordenaba. La colocó a gatas sobre un taburete rojo y patas de oro. Amarró sus manos con una cadena hecha de perlas y comenzó a cortar con su espada el vestido blanco. Cada que rozaba el cuerpo con el frío metal el cuerpo de la niña se estremecía y él procuraba pasar suavemente el filo por la piel. Finalmente estaba allí, frente a ella, a un paso del poder y del regreso a si mismo y a lo suyo, al alcance del dolor ajeno. Ella, ignorante, medio dormía con placer singular. Entonces el príncipe derramó arena en aquella redondez y en un prolongado y grave suspiro perforó una virginidad rosácea. Por respuesta obtuvo un embelesado gemido y un estremecimiento irregular. Continuó, veloz y profundo. Tocando, rasgando, palmeando y pellizcando todo. Ella emitía un sonido constante y rítmico, un llanto excitado, deseado por mucho tiempo. De su fuente salía miel y su piel empezó a tomar la consistencia del caramelo. El príncipe, cabalgando su cintura, se acercaba al final de su misión. Fue así que tomado de las caderas femeninas, apretando con violencia la carne, vio incrementarse la presión de manera exponencial y liberando todo el poder alcanzado para obtenerlo nuevamente en resonancia depositó acero fundido en aquel receptáculo
[c=46][b]Rick[/b][/c] says:
…….
Hija del verano says:
el Príncipe quedo suspendido en la nada. Cuando volvió al mundo de los vivos abrió los ojos después de no haber estado en ninguna parte y vio frente a él a su corte entera atenta de sus movimientos. Sintió en su cabeza el peso de la corona y en su cuerpo la carga de lujosas telas. En el fondo del enorme salón en la esquina izquierda se encontraba una jaula, dentro de ella, el cuerpo desmembrado de la bruja del oeste. Su amable y sabio consejero le sonreía complacido entre sus cortesanos. Los bufones le entretenían y exquisitos manjares llevaban ante sus ojos para obtener la real aprobación. Todo había vuelto con mayor magnificencia. De pronto una duda rasgó su corazón y justo en ese momento sintió bajo su mano la suavidad de un cabello conocido. Bajó la mirada a su derecha y encontró a su niña sonriente y adormilada sentada sobre un enorme cojín. Se miraron profundamente y ella recostó su cabeza en la rodilla de su príncipe mientras el hundía sus dedos en su piel.
Hija del verano says:
Y fueron felices para siempre. FIN
[c=46][b]Rick[/b][/c] says:
wow
[c=46][b]Rick[/b][/c] says:
que buena historia, el mejor de los cuentos que me hayas contado.


La niña del hambre

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